Un embarazo amerita una pausa en tu vida viajera. Pero si eres de las que aman los viajes, debes tomar ciertas recomendaciones con un poco más de calma.
Es probable que en tus días de vacaciones quieras viajar y estés temerosa de realizarlo, ya que estás embarazada. Debes saber que el estar en la dulce espera de un bebé, no es impedimento para disfrutar de los viajes y si te encuentras en perfecto estado de salud, podrías seguir explorando el mundo y compartir la experiencia con el pequeño acompañante que crece en tu vientre.
Recomendaciones
Reducir el estrés.
Organizar tu tiempo te ayudará a reducir la ansiedad y aprovechar mejor el tiempo que estés fuera. Reserva de antemano el asiento del avión, comidas especiales para el vuelo si es que las necesitas y el alojamiento en tu destino final. Viaja ligera de equipaje. Si viajas en auto, trata de no estresarte por el tráfico y siempre lleva contigo un bolso de mano con las cosas esenciales.
Conserva tu energía.
El embarazo no tiene por qué frenarte a la hora de gozar de unas vacaciones activas. Puedes continuar haciendo tus actividades normales, sean caminar, ver museos o visitar nuevos restaurantes. Pero recuerda que, probablemente, te cansarás más rápidamente. Un baño relajante, una siesta, poner los pies en alto un rato, leer un libro en la playa o pasar una tranquila velada en tu habitación con servicio de cena, son opciones que te ayudarán a descansar y a mantener la energía durante el viaje.
Come y bebe suficiente.
Durante el embarazo, comer bien y de forma regular adquiere doble importancia. Durante el viaje es muy fácil que el ritmo de comidas se altere, así que es bueno llevar una bolsa de mano con algunos entremeses como nueces, avellanas, frutas secas, galletas y agua para mantenerte hidratada.
Ve al baño cuando puedas.
Durante el embarazo tienes que ir al baño probablemente tres o cuatro veces más a menudo que de costumbre. Es importante que estés preparada vayas donde vayas. Lleva siempre papel higiénico, toallitas húmedas higiénicas y jabón antibacteriano.
Cuida tus pies y piernas.
Cuando pasas mucho tiempo sentada, es común que se produzca hinchazón de pies y tobillos y calambres en las piernas. Procura usar un calzado cómodo con pasadores o elásticos.
Infórmate sobre las vacunas.
Lo ideal es que te las coloques antes de quedar embarazada.
Protégete de las infecciones vaginales.
El embarazo te hace más susceptible a las infecciones vaginales y éstas, además, son mucho más comunes en climas húmedos y cálidos. Para protegerte contra ellas, viste prendas ligeras y de algodón.
No practiques actividades arriesgadas.
Evita los deportes de contacto y los que conlleven riesgo de caídas y menos de golpes en el abdomen.
Siéntate en el asiento del pasillo.
Las mujeres embarazadas van al baño mucho más de lo normal, así que es recomendable reservar asientos de pasillo para poder salir más fácilmente.
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Fuente: Dra. Nélida Pinto, Ginecóloga.