Conducir en una zona urbana requiere de mucha práctica y responsabilidad, ya que usualmente existen acontecimientos ocasionados por la furia de la naturaleza o erróneas maniobras humanas, que terminan produciendo lamentables desenlaces.

En ese sentido, es muy importante tomar conciencia de una responsable educación vial (peatón – conductor) para estar prevenidos y disminuir los índices de accidentes de tránsito.

Aquí algunas causas más frecuentes:

Exceso de velocidad. Manejar a gran velocidad produce en la persona un alto grado de adrenalina, lo que se traduce en una disminución en la visualización y reacción, lo que puede provocar un trágico accidente.

Conducir bajo los efectos del alcohol o drogas. ¡Cuando tomes no manejes! La influencia de algunas de estas sustancias genera en la persona alteraciones en los sentidos, desencadenando graves consecuencias en su vida y en la de terceros.

Negligencia e imprudencia. Suele suceder que mientras se conduce se realizan otras acciones paralelas, tales como hablar por celular, maquillarse o cambiar de emisora radial, que hacen que te desconcentres del entorno (calles, señalizaciones, etc.) mientras manejas; ello sumado a la imprudencia de los peatones, puede terminar en un terrible accidente.

No respetar las reglas de tránsito. Infringir normas como, pasarte el semáforo en rojo, o realizar cruces prohibidos, entre otras faltas, traen como consecuencia accidentes vehicular. Por eso es importante la presencia de policías de tránsito para controlar que se respeten las normas de seguridad vial.

Fallas mecánicas. Otra de las causas más comunes de accidentes de tránsito son las fallas mecánicas que puede tener tu vehículo. Por eso es importante revisar el estado de tu automóvil antes de salir de tu casa. Es recomendable realizarle un mantenimiento preventivo frecuente, principalmente, de frenos, llantas que pueden estar desgastadas, fugas de gas, combustible u otro líquido.Ello permite incrementar la seguridad vehicular al momento de conducir.

Cansancio físico. La falta de descanso genera alteraciones en la salud, por ende, el no dormir lo suficiente (de 6 a 8 horas diarias) puede traer consecuencias lamentables para tu vida y la de tus acompañantes o transeúntes. Por eso te aconsejamos que si manejas tramos largos es mejor hacerlo después de descansar.

Conducir con mucha lluvia. Por efectos de una lluvia muy intensa, el asfalto se moja y se vuelve resbaladizo, dificultando la acción del limpiaparabrisas. Esto trae como consecuencia que el vehículo se despiste y ocasione un grave accidente. Es mejor detenerse en un lugar seguro y esperar que pase la fuerte lluvia para evitar un accidente vehicular.

Conducir bajo neblina u oscuridad. Manejar en la noche en una carretera poco iluminada o con neblina perjudica una buena visibilidad. Ello incrementa el riesgo de que un accidente de tránsito ocurra .

Es importante crear conciencia de una responsable educación vial y respetar las reglas de tránsito para evitar que ocurran más accidentes y salvar vidas.

En MAPFRE contamos con seguros vehiculares que se ajustan a cada necesidad.

Fuentes:
http://www.tumundodeseguridad.com/causas-mas-comunes-de-accidentes-de-transito/

https://www.lavoz.com.ar/espacio-de-marca/las-10-causas-de-siniestros-de-transito-mas-comunes