Conoce los síntomas del lupus, cómo diagnosticar esta enfermedad y cómo mejorar la calidad de vida de los pacientes con un tratamiento efectivo.
El Lupus Eritematoso Sistémico, más conocido como “Lupus”, es una enfermedad autoinmune crónica difícil de diagnosticar debido a la diversidad de síntomas que pueden afectar a diferentes partes del cuerpo como la piel, las articulaciones, los riñones, el corazón y los pulmones. La buena noticia es que un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado pueden mejorar significativamente la calidad de vida de los pacientes.
¿Cuáles son los síntomas del lupus?
Presta atención a los siguientes síntomas y si presentas alguno acude a un especialista. Recuerda que con tu Seguro de Salud MAPFRE cuentas con Centros Médicos y una amplia red de clínicas. Además, desde Clínica Digital puedes agendar una videoconsulta sin salir de casa.
- Dolor muscular y articular.
- Enrojecimiento de mejillas y nariz.
- Inflamación de la pleura o tejido del corazón.
- Problemas de riñón.
- Dolores de cabeza.
- Úlceras bucales o nasales.
- Fatiga extrema, debilidad y anemia.
El diagnóstico del lupus se realiza a través de una combinación de exámenes de sangre, pruebas de imágenes y análisis de los síntomas del paciente. Para el tratamiento, el enfoque más común se orienta a controlar los síntomas y prevenir complicaciones a través de medicamentos, terapia física y cambios en el estilo de vida.
La detección temprana y el diagnóstico oportuno del lupus son fundamentales para garantizar una buena calidad de vida de las personas que lo padecen. Por ello, es importante realizar un seguimiento continuo con el médico especialista y llevar a cabo los exámenes necesarios para monitorear el estado de la enfermedad.
¿Cómo mejorar el estilo de vida del paciente?
Si has sido diagnosticado con lupus, sigue estas recomendaciones para evitar empeorar los síntomas.
- Protégete del sol: Evita la exposición directa y aprende a usar correctamente protector solar con un alto factor de protección.
- Mantén una dieta saludable: Una dieta equilibrada puede ayudar a reducir la inflamación y mejorar la salud en general. Evita alimentos procesados y ricos en grasas saturadas, y aumenta la ingesta de frutas, verduras, proteínas magras y grasas saludables.
- Haz ejercicio regular: Ejercitarte te ayudará a reducir el estrés, mejorar la flexibilidad y la fuerza muscular, y aumentar la energía. Sin embargo, evita el ejercicio intenso y consulta con el médico antes de comenzar cualquier programa de ejercicio.
- Descansa: La fatiga es uno de los síntomas más comunes del lupus, por lo que es importante descansar lo y planificar las actividades diarias suficientes para evitar la sobrecarga de energía.
- Mantén un registro de los síntomas: Lleva un registro de los síntomas para identificar patrones y desencadenantes. Esto ayudará a tu médico a modificar el tratamiento si es conveniente.
- Cuídate del estrés: El estrés puede desencadenar o empeorar los síntomas del lupus, por lo que es importante encontrar formas efectivas de manejar el estrés, como la meditación, el yoga o la terapia cognitivo-conductual.
Consulta con tu médico si puedes seguir todos estos consejos para mejorar tu calidad de vida. ¡Prevenidos seguimos cuidándonos!