Debes tener cuenta que para establecer un patrón de estudio exitoso se tiene que realizar – en acuerdo con tu hijo – una previa planificación y organización de tiempos (calendarios, horarios, etc) y disponer de un buen material; todo ello siempre debe estar acompañado de mucha confianza y seguridad hacia ellos.
NO OBEDECEN
Existen muchos niños y adolescentes que, pese a lo que los padres dicen, se niegan a tener hábitos de estudio, lo dificulta su aprendizaje aún más. En ese caso, tendrás que corregirlos aplicando medidas correctivas que sean efectivas, sin utilizar golpes o gritos, pero sí limitando los permisos, suprimiendo el uso de TV, tablets y/o celulares, prohibiendo lo que más les gusta usar o hacer. En casos extremos, es recomendable que acudas a un especialista para un mejor apoyo.
ELIGE ALTERNATIVAS
Es importante que sepas que los estilos de estudio, a su vez, utilizan diversas técnicas, las cuales podrías usar para que tus hijos se apoyen en ellas. Dentro de las más comunes están el subrayar, tomar notas, hacer resúmenes, desarrollar pruebas en casa, entre otros.
Asimismo, el hacer las tareas con anticipación y prestar atención al maestro en clase, son actividades básicas e importantes que le permitirán al niño y/o adolescente desarrollar un orden y disciplina, que son los ingredientes indispensables para cumplir con objetivos en la vida.
Muchas veces queremos supervisar la tarea que desarrollan nuestros hijos, pero no sabemos que al sentarnos a su costado para ver lo que hacen o estudian, le estamos generando un mal, pues provocamos incomodidad y estrés. Los especialistas recomiendan hablar con nuestros hijos y darles mayor confianza para que puedan dar lo mejor de sí. Obviamente, y sin que se den cuenta, no estaría de más que los vigiles con mucha cautela, sin que se den cuenta y revisar sus cuadernos un día a la semana. Recuerda siempre preguntarle a tus hijos qué tal les va en el colegio, es algo que no debes dejar de hacer.
Recuerda que también la mejor fuente de energía y concentración que puedes darle a tus hijos es una buena alimentación. No debes olvidar que es importante el descanso después de largas horas de estudio, es una forma de recompensa que logrará reconfortarlos e inyectarles una mejor actitud.
¿CÓMO GENERAR ACEPTACIÓN?
Los especialistas señalan que necesitas tres ítems básicos:
1.- Empatía: Tienes que ponerte en lugar del hijo para que puedas comprender lo que siente. De nada servirá que tomes una actitud tirana, así solo harás que su rebeldía sea excesiva.
2.- Negociación: Manifiéstale que todos tenemos deberes y derechos, por lo que su deber es obtener buenas notas y su derecho es salir o jugar con sus amigos. Tienes que poner en práctica la ‘ley del dar y recibir’ siempre.
3.- Buena comunicación. Para tenerla necesitas inteligencia emocional, que viene a ser el control de tus emociones. No dejes que la ira o rabia influyan en tus acciones. Conversa con tu hijo y trasmite confianza y seguridad.
Debes saber que los hábitos de estudio se van automatizando en la conducta de tus hijos, y pasarán a formar parte de su conducta habitual.
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