¿Sabes cómo ayudar a un familiar que está sufriendo depresión? Aquí te contamos cómo fomentar un espacio seguro para brindar ayuda de forma asertiva.
La depresión es una condición de salud mental que puede darse por diversos factores que pueden influir en su desarrollo y permanencia (enfermedad, problema económico, duelo, etc.), deteriorando significativamente la vida de la persona, ya sea a nivel familiar, académico, laboral y/o social. Se estima que a nivel mundial el 5% de adultos tienen depresión y que 1 de cada 6 personas la experimentará en algún momento de su vida.
Por ello, es importante conocer cómo podemos ayudar y acompañar a un ser querido (familiar, amigo, compañero o conocido) que está transitando por la depresión. A continuación, encontrarás algunas pautas a considerar:
Consejos para acompañar a un familiar con depresión
1. Busca información sobre la depresión
Date un tiempo para buscar fuentes confiables, ya que existen ciertos mitos alrededor de la depresión que pueden agravar más la salud de nuestro ser querido o dificultar que pida apoyo.
- ✘ “La depresión solo la sufren las personas con carácter débil”
- ✔ “Existen varios factores (biológicos, psicológicos y/o sociales) que influyen a que alguien padezca de depresión dependerá de las circunstancias que ocurren y cuán oportunamente pueda contar con apoyo para recuperarse pronto.”
- ✘ “La depresión mejora por sí sola, solo tienes que ponerle ganas”
- ✔ “En la depresión se ve afectado el estado de ánimo, la energía y la capacidad para realizar actividades cotidianas, por ello es importante recibir un tratamiento adecuado”
2. Bríndale un entorno seguro para expresarse
Cuando quiera hablar contigo bríndale un espacio y tiempo, hazle saber que te interesa cómo se siente y lo que piensa, no lo juzgues y escucha de manera activa manteniendo tu mirada y postura hacia la persona.
3. Valida sus sentimientos y emociones
No lo juzgues, no minimices su experiencia emocional y evita decir frases como “no estés triste por eso”, “no es para tanto”, “tienes que ser fuerte”, etc. La mejor opción es preguntar e intentar comprender la situación por la que está pasando; reconoce y valida sus sentimientos y emociones, ya que tienen sentido en su historia personal y la situación actual que está viviendo.
Ante esa situación, puedes decir “cuenta con mi apoyo”, “es normal que eso te preocupe”; e incluso, a veces no será necesario decir algo, solo estar a su lado sin juzgar será lo mejor.
4. Ofrécele tu apoyo
Cuando se experimenta depresión, algunas de las tareas diarias (preparar el desayuno, lavar la ropa, salir a realizar un trámite, realizar las compras de la semana, etc.) pueden acumularse y resultar abrumadoras. Por eso, ofrecer ayuda o compañía para realizar estas acciones puede ser de gran ayuda.
5. Planifica y proponle actividades juntos
Parte de la depresión puede implicar la disminución de la capacidad de disfrute y la poca disposición para realizar las actividades, por ello puede ser de mucha ayuda darle ideas y proponerle actividades que pueden realizar juntos, a su propio ritmo, sin llegar a que se sienta obligado; también puedes pedirle que te acompañe o ayude a realizar alguna actividad que sepas le puede gustar.
6. Valora sus logros desde los más pequeños
Evita las críticas y reproches, estos solo activan los sentimientos propios de la depresión, mejor focaliza tu atención en los avances y cambios desde los que consideres “más pequeños”, ya que para la otra persona ha demandado un esfuerzo grande conseguirlo, recuerda que una característica de la depresión es la sensación de poca energía y realizar actividades le cuesta más.
7. Anímale a buscar ayuda profesional
Muchas veces la persona puede no darse cuenta que está experimentando depresión o puede pensar que no existe un tratamiento que lo ayude, por ello es importante hablarle sobre la psicoterapia y facilitarle información y los contactos telefónicos para que obtenga la ayuda profesional.
8. Cuida de tu propio bienestar
Si estás acompañando a un ser querido con depresión, es fundamental destinar un tiempo para el cuidado de tu propio bienestar, aliméntate, descansa y realiza actividades que te permitan desconectar de tu rutina; no está mal cuidarte emocionalmente, date el espacio y si necesitas contención comunicarlo a tu red de apoyo puede ser de mucha ayuda.
No está mal cuidarte emocionalmente y si necesitas contención emocional, comunícalo a tu red de apoyo: amigos, familiares y/o compañeros.
Te compartimos un video como parte de una campaña de concientización de la OMS y OPS para conocer cómo se siente una persona que está transitando por la depresión.