Andrés Uribe, director de Finanzas de MAPFRE Perú, escribió para Semana Económica sobre el nuevo retiro de los fondos AFP y las oportunidades de inversión.

Columna publicada en Semana Económica.

El nuevo retiro de fondos de pensiones significará un golpe a la capacidad de gasto a futuro de los peruanos, muchos de los cuales dejarán sus fondos en cero. Pero hay que considerar que la salida de fondos puede significar nuevas oportunidades de inversión sobre todo en el corto y mediano plazo.

En menos de un mes desde su presentación como propuesta a cargo de la Comisión de Economía del Congreso, se aprobó una sexta libre disponibilidad de los fondos de AFP. Para algunos esto significa un salvavidas ante duros efectos de la crisis económica como el desempleo y una inflación que hace insostenible afrontar la canasta básica familiar. Para otros, esta es la sustracción final que dejaría en cero sus arcas para el futuro y la pérdida del potencial de una mejor pensión para la vejez.

Retiros masivos en los fondos de pensiones obligan a las AFP a liquidar prematuramente las inversiones de los fondos. Esto compromete la rentabilidad en conjunto del sistema, es decir, las ganancias de aquellos que mantienen sus ahorros intactos pensando en su pensión futura y las propias, al recortar súbitamente los plazos de las inversiones en las que estaban comprometidos los fondos. En el corto plazo, el retiro anticipado puede incrementar el movimiento de la economía y generar un breve estímulo; sin embargo, a futuro, la capacidad de gasto de los peruanos que ahorran en el sistema privado de pensiones se verá tan comprometida como su calidad de vida.

¿Y si el objetivo no es retirar para gastar sino para reinvertir? Entonces, los usuarios deberán evaluar sus objetivos de inversión. Si se buscan rentabilidades a largo plazo, quizás lo más recomendable sea que los fondos permanezcan en la AFP. Sin embargo, si la meta es obtener retornos a corto o mediano plazo, existen instrumentos de inversión disponibles en el mercado financiero, como los fondos de factoring o fondos inmobiliarios cuya rentabilidad podría incluso equiparar a la de una AFP, pero asumiendo otros riesgos.

O si, por el contrario, si prefiere navegar por aguas más seguras, hay opciones con activos menos riesgosos. Un seguro de vida que se adecúe a cada perfil de riesgo es una opción. El mercado ha madurado y las alternativas son múltiples.